Por Soledad Ghione (CLAES) – Frente a las actuales amenazas a la biodiversidad y la extinción de especies, un grupo de investigadores realizó un estudio prospectivo para identificar cuestiones emergentes que podrían jugar papeles claves en esta problemática.
William J. Sutherland de la Universidad de Cambridge (Inglaterra), junto a 22 investigadores colaboradores realizaron una exploración de cuestiones emergentes sobre conservación a tener en cuenta para el 2010, el año Internacional de la Biodiversidad.
El procedimiento, denominado “horizon scanning” o exploración de cuestiones emergentes, consiste en identificar amenazas potenciales a la biodiversidad a escala global, de modo de advertir a los gobernantes, legisladores y a los tomadores de decisiones. Los autores consideran que si esta exploración es realizada con suficiente anticipación, puede aumentar la capacidad de adaptación a estos problemas, e influir sobre las investigaciones y sobre las estrategias de gestión para la conservación de la biodiversidad.
El estudio, publicado en la revista Trends in Ecology and Evolution, identificó 15 cuestiones emergentes: contaminación por microplásticos, residuos de nanoplata en aguas de desecho, elaboración de carne sintética, aerosoles estratosféricos, elaboración y promoción de biocarbón, tecnología móvil, desoxigenación oceánica, cambios en bacterias desnitrificantes, volcanismo de alta latitud, vida artificial, colonización y dispersión trans-Ártica, colonización asistida, impactos de reducir emisiones de la deforestación y degradación de bosques en ecosistemas no-forestados, adquisiciones internacionales de tierras de gran escala, invasión de pez león indo-pacífico.
El estudio se comenta en detalle en la serie Ecología y Conservación en el 2010, de CLAES, donde se analizan diferentes enfoques en ecología y conservación desde una perspectiva latinoamericana, como contribución a las discusiones del Año Internacional de la Biodiversidad. El reporte completo se puede descargar aquí …
El listado de esas cuestiones es un conjunto heterogéneo, y muchas de ellas se presentan como problemas globales, pero en realidad están sesgados a asuntos del hemisferio norte.
A pesar de algunas limitaciones, es destacable que muchas de las cuestiones identificadas están directamente relacionadas con innovaciones tecnológicas. Éstas proveen beneficios directos para los seres humanos, como el desarrollo de la nanotecnología, lo que hace muy difícil que puedan ser revertidas, lo que provoca problemas de gestión.
Surge entonces una cuestión clave para América Latina: las evaluaciones ambientales en particular, y de beneficios para el desarrollo, en general, de la introducción de nuevas tecnologías.
Otra cuestión es que este ejercicio, publicado en inglés en una revista académica, enfrenta muchas dificultades para llegar a gobernantes, legisladores y tomadores de decisiones.
Finalmente, este es un ejercicio positivo, pero debe ir más allá de meros listados de potenciales amenazas a la biodiversidad, desviando la atención de las cuestiones actuales, reales y concretas. La identificación de cuestiones emergentes es valiosa y puede ser muy útil en temas de conservación, pero precisa que sea acompañada por medidas y acciones concretas que provean soluciones reales a escala local y global.
S. Ghione es bióloga, investigadora en CLAES (Centro Latino Americano de Ecología Social).
Publicado originalmente en el sitio Ecología y Conservación de CLAES.