Crisis de biodiversidad pone a la humanidad en riesgo

Crisis de biodiversidad pone a la humanidad en riesgo

El nuevo reporte de la Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (IPBES) de la ONU, es alarmante. Enfrentamos una crisis de biodiversidad con aproximadamente un millón de especies en riesgo de extinción. Sabemos que al menos 680 especies de vertebrados se han extinguido recientemente.

El informe de 1.800 páginas, elaborado a partir de decenas de estudios académicos en todo el mundo, concluye que tres cuartas partes de superficie terrestre han sido «severamente alteradas» por la acción humana. La superficie agrícola, el proceso de urbanización y la construcción de diques han modificado drásticamente los ecosistemas, afectados también por el aumento de dióxido de carbono en la atmósfera, el aumento de las temperaturas y las especies invasivas.

La destrucción de la naturaleza se está dando a una velocidad nunca antes vista y nuestra necesidad de más alimentos y energía son los principales impulsores. «Estamos perdiendo biodiversidad de una manera tan rápida e insostenible que afectará al bienestar de la especie humana tanto en las presentes como las futuras generaciones», advierte el químico británico Robert Watson, director del panel científico, en declaraciones a The Guardian.

Mientras la población mundial se ha duplicado desde 1970, la economía mundial se ha cuadruplicado y el comercio internacional se ha multiplicado por 10. Para alimentar, vestir y dar energía a este mundo en expansión, los bosques se han talado a velocidad asombrosa, especialmente en áreas tropicales.

Entre 1980 y 2000, se perdieron 100 millones de hectáreas de bosque tropical, principalmente por la ganadería en América del Sur y las plantaciones de aceite de palma en el sudeste asiático. Peor que los bosque tropicales se encuentran los humedales: en el año 2.000 solo se conservaba el 13% de los que existían en 1700.

El estudio también documenta que los suelos se están degradando como nunca antes. Esto ha reducido la productividad del 23% de la superficie terrestre de la Tierra.

El informe muestra que toda esta actividad humana está matando especies en mayor número que nunca. Aproximadamente el 25% de especies terrestres, de agua dulce y vertebrados marinos así como de invertebrados y grupos de plantas estudiados. A medida que se tiene informaciones de otras especies, los indicadores son también alarmantes. Por ejemplo, la cobertura de corales vivos en los arrecifes se ha reducido a la mitad respecto a los pasados 150 años. No se conoce con exactitud la situación con los insectos, pero hay muchos documentos que indican reducciones similares.

Aproximadamente, el 9% de las 5,9 millones de especies estimadas que existen (es decir, más de 500.000 especies) tienen unos hábitats tan fragmentados y escasos, que son insuficientes para garantizar su supervivencia a lago plazo. De ahí que el informe crea que pueden ser consideradas como especies muertas que caminan (zombis), a no ser que sus espacios naturales sean restaurados.

Esta es una reducción muy distinta a la historia humana pasada, y por ello se habla de un proceso de extinción masiva de la vida.

 

El deterioro en números

Riesgo de extinción de especies: aproximadamente el 25% de las especies ya están en peligro de extinción en la mayoría de los grupos de animales y plantas estudiados.
Ecosistemas naturales: se han reducido en un 47% en promedio.
Biomasa: la biomasa global de los mamíferos silvestres ha disminuido en un 82%.
Naturaleza para los indígenas: el 72% de los indicadores desarrollados por las comunidades locales muestra un deterioro continuo de elementos de la naturaleza que son importantes para ellos.

 

Paralelamente, se está produciendo una montaña de residuos. La contaminación plástica se ha multiplicado por 10 desde 1980. Cada año descargamos entre 300 y 400 millones de toneladas de metales pesados, solventes, lodos tóxicos y otros desechos en las aguas del mundo.

Los expertos estiman que la humanidad se ve amenazada por un desafío triple: el clima, la naturaleza y la producción de alimentos. “No tenemos tiempo para desesperarse”, dijo. “Debemos tener la esperanza de tener la oportunidad de hacer algo al respecto durante estos dos años”, declaran los responsables del reporte. Su conclusión es clara: los actuales estilos de desarrollo son insostenibles y todo eso pone a la humanidad en riesgo.

Los documentos de IPBES están disponibles aquí…
Basado en reportes del PIEB, resúmenes en BBC Noticias, La Vangiardia y El Mundo; gráfico reproducido de BBC.